Ésta es su historia más o menos:
El amigo fundó con Welles la Mercury Theatre, después se dedicó a la producción cinematográfica. De esas cayeron: la ópera prima de Nicholas Ray (y otras dos pelis más con él),
Carta de una desconocida (un poco coñazo desde mi punto de vista),
Cautivos del mal,
Julio César,
Los contrabandistas de Moonfleet y otros títulos con directores como Sydney Pollack o John Frankenheimer.
No contento con esto, sin haber actuado antes en una película sustituyó a James Mason en The Paper Chase lo que le reportó un oscar al mejor actor secundario en 1974. A partir de entonces abandonó la producción y se dedicó a la interpretación hasta el día de su muerte a los 86 años.
4 comentarios:
¿Qué tal se le daría al Sr. Houseman elaborar dosieres para el ICAA?
Rubén ya me está poniendo mala cara, sólo estoy siendo sarcático, Rubén, no es llorar, es reír.
Yo creo que se le daría bien, parece que era un tipo bastante listo.
¿A tu edad aún distingues entre listos y tontos?
Yo no leo los dosieres que subvencionan, pero si veo los cortos correspondientes y sus autores parecen cualquier cosa menos listos.
EL comentario anterior es mío Rubén, lo hice desde el mail de la bodega sin darme cuenta.
Sorry
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